El nártex en las basílicas románicas es el pórtico situado entre el atrio y las naves del templo, del que está separado por divisiones fijas, destinado a los penitentes y a los catecúmenos (no bautizados). El modelo proviene de las antiguas basílicas paleocristianas. Cuando se encuentra en el exterior de las fachadas, como pórtico abierto, se llama exonártex.
Foto hecha con el móvil.
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Sinaia, Rumanía.