Aunque el castillo de Bran es famoso por su asociación con el personaje ficticio del conde Drácula, no hay evidencias sólidas de que Vlad Tepes haya vivido allí en persona. Se sostiene que su verdadera fortaleza fue el castillo de Poenari, que hoy se encuentra parcialmente en ruinas. Vlad Tepes solo pasó dos días en el castillo de Bran, encerrado en un calabozo, en su camino hacia la prisión de Budapest cuando la región estaba ocupada por el Imperio otomano.
Fuente: Bing Copilot.
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Bran, Rumania