Cuatro palos y ni una vela


Uno de los veleros automatizados (el Wind Star o el Wind Spirit) de la compañía de cruceros de lujo Windstar Cruises. Las velas son controladas por un ordenador. — Manuel Antonio – Puntarenas, Costa Rica.

Playa Espadilla


La Playa Espadilla es la última de acceso libre antes de entrar en el Parque Nacional Manuel Antonio. Cuando sube la marea del Pacífico apenas queda arena en la que estirarse o caminar. — Manuel Antonio – Puntarenas, Costa Rica.

Vista desde el hotel


La Punta Catedral, en el Parque Nacional Manuel Antonio, desde las terrazas del hotel. Foto hecha con el móvil. — Manuel Antonio – Puntarenas, Costa Rica.

Ladronzuelo


El mono carablanca o capuchino de cara blanca (Cebus capucinus) es muy travieso y aprovecha la mínima ocasión para colarse en tu habitación de hotel y robarte tus pertenencias. En la playa también. Hay que tener mil ojos. Foto hecha con el móvil. — Manuel Antonio – Puntarenas, Costa Rica.

Antes que yo


Foto hecha con el móvil. — Manuel Antonio – Puntarenas, Costa Rica.

Mejor no entrar


Y menos aún con chanclas. Foto hecha con el móvil.—Manuel Antonio – Puntarenas, Costa Rica.

Sin pisar


Foto hecha con el móvil. — Manuel Antonio – Puntarenas, Costa Rica.

La ola que llega


Y viene una nueva ola antes de que se haya retirado la anterior. Foto hecha con el móvil. — Manuel Antonio – Puntarenas, Costa Rica.

Sin factor de protección


De momento no hemos visto el sol en ninguno de nuestos días de estancia en Costa Rica. Foto hecha con el móvil. — Manuel Antonio – Puntarenas, Costa Rica.



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